lunes, 14 de febrero de 2011

Cluedo V

La noche del asesinato era una noche de lunes como otra cualquiera, como una de martes, o de miércoles, de sábado no, las de sábado tienen un no sé qué. Era una noche sin novedades en el bar de las hermanas, estaban los de siempre haciendo lo de siempre, beber. Algunos bebían tanto que a veces se les olvidaba hasta cenar. El Capitán no era de ésos, él cenaba siempre. Entró al local pasadas las doce haciendo eses. La verdad que era un espectáculo bastante lamentable. Un Capitán, todo un Capitán convertido en nada de la noche a la mañana. Arruinado por las drogas, las mujeres y las putas. Inmerso en un caso de corrupción, de robo de coches, de dinero y de dignidad. Entró en el bar y se sentó justo al lado de Mery Lights. Le llamó puta, pero no un puta en plan insulto, sino un puta en plan cariñoso, en plan ya sabes a lo que vengo diosa de ébano. Pero Mery Lights no estaba dispuesta, una es puta pero tiene su dignidad y un capitán en decadencia no merece que se baje las bragas. El Capitán enfureció y empezó a chillar: “No te hagas la digna, el otro día en mi casa bien que te arrodillabas siempre que te lo pedía” Acabó la frase con un puta, pero esta vez no en plan cariñoso. Mery Lights le abofeteó antes de enrojecer de vergüenza, todo el mundo había descubierto que no era tan de lujo como decía. Picatous intentó calmar a El Capitán de la única forma que una tía como Picatous sabe hacerlo: comiéndole la boca, y la oreja, y el cuello y… hubiese seguido un poco más abajo si no hubiese sido porque el bar ya no miraba a su amiga. Le dio un rodillazo donde más les duele a los hombres, a los tíos duros. Ya nadie se acordaba del incidente con Mery Lights, ver un rodillazo en los huevos siempre es un asunto de interés. Picatous se fue corriendo al baño, se lavó los labios hasta hacerse sangre. ¿Cómo había podido besar al tío que violó a su hermana? Estaba allí para matarle, se lo había prometido a su hermana y el momento de hacerlo se estaba acercando. El Doctor Hurañeak se acercó a El Capitán, un rodillazo en los huevos no es una enfermedad pero sigue siendo un rodillazo en los huevos. Se sentaron en una mesa y el Doctor le pidió una manzanilla. Nada más tomársela, el Doctor fue directo al grano: “Me debe usted dinero Capitán, mucho dinero. Tanto que sino me lo devuelve me veré obligado a hacer algo que no quiero. No sé si lo sabe pero al aprender a curar también se aprende a todo lo contrario. Tome mi tarjeta y cuando tenga el dinero llámeme. Y que no sea muy tarde amigo, no tengo mucha paciencia.” (nota para mí: una puta puesta en evidencia que ya no podrá cobrar tanto a los clientes, una tía que le jura a su hermana venganza y un médico que lo mismo le da matar que curar cuando le deben dinero.)

3 comentarios:

  1. Oye, tiene mucha gracia y está muy bien. Hay una cosa extraña que no sé si has advertido. Dices. "Arruinado por las drogas, las mujeres y las putas". Me ha hecho pensar, en serio, si es un error esa distinción entre mujeres y putas, o quieres decir algo más. Creo que algo más.
    Besos

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  2. Algo más. Por supuesto que considero a las prostitutas mujeres. Quería referirme, no sé si lo habré conseguido,a que las mujeres con las que tuvo una relación de pareja querían más su dinero que a él y también que él se gastó el dinero en prostitución. Por eso la distinción.
    Gracias por el comentario Rodolfo.

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  3. hola guapa!
    me gusta lo que leo , aqui me quedo y te sigo , un beso :)

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